La imagen que acompañe el CV debe reflejar la imagen profesional que el candidato desea dar
- ¿Cómo elegir la imagen ideal para adjuntar en el currículum?
- Los trabajadores deben elegir una fotografía que refleje el perfil profesional que poseen.
- Las imágenes casuales, recortadas de antiguas fotografías y llenas de filtros quedan completamente descartadas.
En la era de la tecnología, las selfies están por todas partes. Sin embargo, es importante destacar que no es lo mismo tomarse una fotografía para postear en Instagram que una para adjuntar en el CV. Esta última elección debe ser realmente cuidadosa pues dirá mucho de quienes somos como profesionales.
La foto del currículum tiene doble finalidad: por un lado, sirve a los reclutadores como una primera impresión del candidato, un reflejo de la importancia que este da a su imagen y cuidado personal; por otro, sirve a los trabajadores como una carta más de presentación o un método más para transmitir su perfil profesional. Para unos y para otros, es un elemento de suma importancia en el CV.
Muchas veces se ha dicho que los reclutadores rechazan los CV sin fotografías, y otras tantas que algunos profesionales de Recursos Humanos demandan específicamente currículums sin imágenes (los denominados CV ciegos). Sobre si deben incluirse o no, no hay posturas totalitarias, pero cuando se incluyen, existe una serie de condiciones en las que en líneas generales todos los reclutadores concuerdan.
Plano
El plano elegido para la fotografía de un CV no puede ser demasiado extenso, así como tampoco demasiado breve.
Las fotografías de paisajes donde el candidato apenas se ve o es un elemento más de la escena, deben ser completamente descartadas. El candidato debe ser la figura principal, de hecho, es recomendable que sea la única para no crear confusiones o distracciones.
El plano elegido tampoco puede ser muy corto, pues muchas veces resulta incómodo ver una fotografía en primer plano.
Lo mejor será preferir un plano medio, donde el candidato se muestre de frente a la cámara y sin elementos que distraigan la atención. Tradicionalmente, lo recomendado es tomar las fotografías para el CV del mismo modo que para un documento de identidad o credencial formal: con un fondo blanco por detrás.
Color
Respecto al color, es necesario decir que todas las fotografías con filtros, tonalidades extrañas o retoques de color exagerados quedan completamente descartadas para un CV.
Las fotografías en blanco y negro o tonos sepia suelen ser aceptadas, pero esto dependerá del reclutador así que para evitar dejarlo al azar lo mejor es utilizar una a color, sin grandes retoques o filtros.
Al referirnos al color en las fotografías para el CV también es necesario indicar que el candidato puede utilizar a su favor el pequeño espacio que éstas representan, utilizando en su indumentaria colores que destaquen. El negro y el azul marino siempre reflejan una imagen profesional, por lo que elegir prendas de estas tonalidades será un verdadero acierto. Si buscas ingresar a una empresa con un color corporativo definido y tienes la posibilidad, puede ser una buena idea añadir en tu CV una foto en la que utilices dicho color.
Forma
Los CV con diseños se encuentran de moda, pero en algunos casos estos son perjudiciales. La fotografía debe ser sencilla, e incluirse en una forma tradicional: o rectangular o circular, nada más.
El tamaño puede variar de acuerdo al modelo de CV elegido, pero lo importante es que se respeten las formas y se eviten figuras extravagantes.
Lenguaje corporal
La fotografía que incluyas en tu CV funcionará como un mensaje sobre el tipo de profesional que eres, por lo que es importante que cuides tu lenguaje corporal.
Evita cruzar los brazos, parecer demasiado rígido, arquear las cejas, hacer muecas con los labios o mirar a cualquier parte.
Para obtener una buena foto para tu CV lo mejor será que la tomes de pie, con los brazos cayendo libremente a los lados, la cara relajada, la mirada al frente y una leve sonrisa. Puedes optar también por una sonrisa más extensa, pero recuerda que la idea no es tomar una fotografía de cumpleaños sino brindar una imagen profesional, así que no te pases de la raya.
¿Pensaste ya en la imagen que quieres dejar en tu CV? Imagina lo que quieres reflejar y luego toma una fotografía en la que puedas dejar claro ese mensaje.
Si ninguna te convence, es recomendable que lo intentes varias veces hasta obtener un resultado satisfactorio. También puedes pedir ayuda a un familiar e incluso solicitar una sesión de fotos profesionales con un fotógrafo, te parecerá raro al comienzo, pero verás que al final del día es una gran inversión, pues te permitirá actualizar tus redes sociales profesionales con imágenes recientes y de excelente calidad.
Fuente: Universia